Orígenes va dirigido al público en general, en principal a las nuevas generaciones y por qué no, también al intelectual. En las páginas de este libro, el lector encontrará imágenes que ayudan a reflexionar y conocer una vida rural de otra época, así como anécdotas basadas en la realidad, también informaciones sorpresivas. Son textos breves, con un toque humorístico; se pueden digerir sin enfado. La autora, sin recurrir a la retórica, optó por redactar textos con un vocabulario distinto al de hoy. No es error la pronunciación, así lo aprendieron los nativos cuando les cambiaron su lengua materna. Ella lo transmite. No hay palabras nefastas, somos nosotros quienes les damos la interpretación convenida. El diccionario es una cosa, la modernidad otra, nuestros antepasados sabiduría. Opinión de Derva Orozco Maciel.
