Sinopsis
Al llegar a la entrada de la galería, mis ojos recorrieron el lugar, buscando a la persona que menos esperaba ver: Mia, mi ex. Pero antes de poder localizarla, un pequeño niño se plantó frente a mí con una expresión de asombro.
?¡Wow! ¡Eres enorme! ?exclamó el niño, mirando hacia arriba con los ojos bien abiertos.
Sonreí, divertido por su entusiasmo, y me agaché para quedar a su altura.
?Sí, algo así ?le respondí, jugando con la idea?. Pero, ¿no deberías estar en la cama a estas horas?
El niño frunció el ceño, como si estuviera evaluando mi comentario.
?¿Y perderme todo esto? ?dijo, y luego bajó la voz en un susurro confidencial?. Si me cargas, te mostraré dónde guardan el helado.
Reí, divertido por su audacia, y lo levanté en brazos.
?¿Cómo va la vista desde aquí arriba? ?le pregunté.
?¡Puedo ver todo! ?respondió emocionado, pero de repente su cuerpo se puso rígido y su rostro se llenó de seriedad?. Mami.
Me giré, curioso por conocer a la madre de este pequeño, y me quedé atónito al encontrarme cara a cara con Mia.
Mia, la misma Mia que había dejado una huella imborrable en mi vida, ahora estaba allí, con una expresión de sorpresa similar a la mía.
?¿Mami? ?repetí en mi mente, tratando de procesar lo que acababa de escuchar. ¿Este niño había llamado "mamá" a Mia, mi Mia?
El peso de la situación me golpeó de repente, dejándome sin palabras mientras intentaba reconciliar la imagen de Mia con la de madre de este pequeño.