[...] Borges hablaba de Ireneo en "su pobrearrabal sudamericano" al sur del continente. Yo, luego de leer estas páginas, que usted está a punto de leer, pienso en Ireneo. Pero recuerdo a Fernando Vera Ángel. Y conozco a una Medellín que está en sus recuerdos, que para mí son descubrimientos. Casi en su totalidad, estas historias sucedieron antes de que yo naciera. Aun así, el haber recorrido los lugares aquí mencionados me dio la oportunidad de recordarlas. A la mayoría de las personas que aparecen entre esas líneas he podido conocerlas. A algunas, pocas, personalmente, sin dimensionar quiénes eran para los demás. O para mí. A otras, muchas, por sus letras u obras que, hoy entiendo, marcaron la historia del siglo veinte, no sólo de Medellín, sino de Colombia, e incluso del mundo. [...] Esta Medellín, la de estas páginas, es necesaria recordarla con ayuda de quienes la vivieron.