Todos hemos oído hablar de ellos, pero, ¿qué es realmente un hacker? ¿Hay algo más allá del encapuchado que, encerrado en un sótano oscuro, teclea rápidamente para intentar burlar sistemas de seguridad informáticos?
Carlo Milani define lo hacker, ante todo, como una actitud: una predisposición a deshacer las lógicas de dominación que nos imponen las tecnologías, cuya complejidad nos obliga con frecuencia a subordinarnos a la figura del «experto». Así, un hacker no es necesariamente alguien que trata de desclasificar documentos del Pentágono, sino todo aquel que quiere establecer una relación de iguales con aquellos «seres técnicos» -móviles, ordenadores, electrodomésticos- con los que convivimos a diario. Partiendo de las tesis de Ivan Illich, Milani nos propone una reconfiguración de nuestra visión tecnosocial, liberándola de la lógica orden-obediencia propia del imaginario jerárquico y proponiendo un nuevo vínculo convivial con las máquinas.