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Gustavo Alvarez Gardeazábal
Reconocido ampliamente por su faceta de escritor, ha publicado numerosos libros y más de mil artículos y/o ensayos. Su novela más reconocida es Cóndores no entierran todos los días (1972), en la cual describe la violencia del país en mitad del siglo XX. Ganadora del Premio Manacor, fue llevada al cine por Francisco Norden.
En 1984, ganó la prestigiosa beca de la Fundación John Simon Guggenheim8¿ por su contribución y creatividad literaria de ficción, que lo llevó de nuevo por un período a los Estados Unidos. En ese tiempo vivió en Ithaca, Nueva York donde inició la novela El Divino y fue invitado a hacer presentaciones de su obra en prestigiosas universidades de los Estados Unidos. Por varios años ha colaborado con una columna regular de análisis y crítica en el periódico "El Colombiano" de Medellín. Su trabajo periodístico tanto escrito como radial, se ha caracterizado por su independencia de criterio, su afán en la verificación de las fuentes y su osadía permanente en llamar por su nombre los casos de abuso de poder, despilfarro o corrupción oficial.
Su obra está referida a los temas de la violencia en Colombia, el fetichismo de la religión, la corrupción de los gamonales o caciques y en general al conflicto social. Pero también menciona pasajes que suceden en la intimidad y las indiscreciones sexuales de sus personajes en ocasiones jocosas y hasta ridículas. La estructura moderna de la novela y el lenguaje depurado le han ganado amplia aceptación.
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