La obra del grupo de escritores nucleado alrededor de la revista Origenes (1944-1956) representa el mayor momento de la literatura cubana del siglo XX y equivale en importancia a la obra de los mexicanos de la revista Contemporaneos y a los argentinos de Sur. Jose Lezama Lima, Virgilio Pinera, Eliseo Diego, Fina Garcia Marruz, Cintio Vitier son algunos de sus nombres. Al analisis de lo escrito por ellos, y al pronostico de lo que serian en el futuro, dedico Maria Zambrano su esclarecedor ensayo La Cuba secreta. Forjadores de obras esplendidas y disimiles, se encargaron tambien de construir el canon de la poesia cubana. De manera que hablar de Origenes supone hablar de toda la literatura del pais, de las dificiles relaciones entre arte y nacionalismo, nacionalismo literario e historia politica. El libro perdido de los origenistas estudia, mediante la obra de estos escritores y de un par de escritores cubanos del siglo XIX como Julian del Casal y Jose Marti, los vinculos entre poesia e historia. Discute las interpretaciones al uso que intentan identificar la obra de esos escritores a la revolucion triunfante en 1959. Y es por ello un estudio acerca de las tergiversaciones y la desmemoria historica. Valiendose del analisis de piezas literarias y de algunos detalles biograficos, su autor trata de aquello que constituyo tema del editorial del primer numero de la revista: la imbricacion de arte y vida. El libro perdido de los origenistas reune ensayos escritos a lo largo de quince anos de estudios y polemica literaria.
La obra del grupo de escritores nucleado alrededor de la revista Orígenes (1944-1956) representa el mayor momento de la literatura cubana del siglo XX y equivale en importancia a la obra de los mexicanos de la revista Contemporáneos y a los argentinos de Sur. José Lezama Lima, Virgilio Piñera, Eliseo Diego, Fina García Marruz, Cintio Vitier son algunos de sus nombres. Al análisis de lo escrito por ellos, y al pronóstico de lo que serían en el futuro, dedicó María Zambrano su esclarecedor ensayo La Cuba secreta. Forjadores de obras espléndidas y disímiles, se encargaron también de construir el canon de la poesía cubana. De manera que hablar de Orígenes supone hablar de toda la literatura del país, de las difíciles relaciones entre arte y nacionalismo, nacionalismo literario e historia política. El libro perdido de los origenistas estudia, mediante la obra de estos escritores y de un par de escritores cubanos del siglo XIX como Julián del Casal y José Martí, los vínculos entre poesía e historia. Discute las interpretaciones al uso que intentan identificar la obra de esos escritores a la revolución triunfante en 1959. Y es por ello un estudio acerca de las tergiversaciones y la desmemoria histórica. Valiéndose del análisis de piezas literarias y de algunos detalles biográficos, su autor trata de aquello que constituyó tema del editorial del primer número de la revista: la imbricación de arte y vida. El libro perdido de los origenistas reúne ensayos escritos a lo largo de quince años de estudios y polémica literaria.